domingo, 12 de enero de 2014

La Gran Belleza

La abrumadora belleza, el universo estético y la profunda vacuidad de algunos de los personajes de esta película, me han conectado rápidamente con las películas de Wong kar Wai, Deseando amar o 2046. 

Sin embargo, esta película tenía que ser italiana : hay un diálogo constante entre la Forma, en tanto que Estética y un interrogante permanente sobre el sentido de la Vida o quizá, mejor, no tanto sobre el sentido, futurible, teleológico, como acerca de qué es la Vida, dónde está, cuál es su manifestación, si aparece soterrada bajo tanta Belleza...artificial. Placer filosófico y mediterráneo...

lunes, 6 de enero de 2014

Marina and the Monsters



Entre el profesorado de secundaria, hay gente valiosísima llena de creatividad y de arte, que son compañeros estupendos, y entre la excepcionalidad cotidiana de formar a jóvenes, que no se dejan, y de cargar con las bolsas del súper para atender las necesidades domésticas y familiares, son capaces de trascenderse en puro acto creador.

Este es el caso del bajista y cantante pop, Kike Romero, que en el listado del BOE es un profesor de inglés    llamado Enrique Romero Iturbe, con una trayectoria musical de muchos años y que, tras discos impactantes con La Prima Donna , Cachomostro y The Monsters, me conquistó con la poesía de un disco en solitario Autogiro Romero (pendiente de análisis y artículo, porque hay canciones como versos...) hasta llegar al poderío de una voz contundente y llena de color, la de Marina, acompañada felizmente, por unas guitarras a veces, intrépidas y otras, sutiles.

Celebro mi día de Reyes escuchando este tema, que os ofrezco, porque no puedo evitar, en un día como hoy, celebrar el Arte. 

No creo que fuera otra cosa el oro, el  incienso y la mirra.



jueves, 2 de enero de 2014

Esperanza cervantina para el nuevo año

A mi querida Azucena Rodrigo, que así me felicita el año.




—Sábete, Sancho, que no es un hombre más que otro, si no hace más que otro. Todas estas borrascas que nos suceden son señales de que presto ha de serenar el tiempo y han de sucedernos bien las cosas, porque no es posible que el mal ni el bien sean durables, y de aquí se sigue que, habiendo durado mucho el mal, el bien está ya cerca.


(Don Quijote de la Mancha, Primera parte, capítulo XVIII, )