miércoles, 8 de febrero de 2012

Presbicia: la enfermedad de la lectura.

   El antídoto contra la mala baba de ser insultado como gafotas, ha sido la creación de la imagen de la sabiduría engafada. Por eso, los que hemos gozado de vista de águila, en algún momento de nuestra juventud inicial, hemos coqueteado con alguna leve miopía para parecer listísimos (hoy, las jóvenes se operan el pecho), o hacer creer que llevábamos una vida aventurera y cierta, tras las barricadas de las bibliotecas públicas, auténticos santuarios de mi placer adolescente (la Amarilla del madrileño barrio de Aluche, cuyo carnet me quitó mi madre por robarle horas de sueño a mi crecimiento infantil o la inquietante de la Plaza de los Bandos, en Salamanca, de mi adolescencia errante).


   Me resigné a ser una estudiante brillante y sana, poco elegante en el sentido decadente de la palabra: me encantaba comer, dormir, reír, caer rendida y así, un poco a lo Sancho Panza, puro realismo, sentido práctico de la vida y huyendo de los rollos-repollo, que no van a ninguna parte y que se declaman con voz engolada.

   Por si alguna vez me hacía escritora famosa, tenía preparada la respuesta a la pregunta ¿Qué libro se
llevaría usted a una isla desierta? 

   Las pasadas navidades me dijo la oculista que mi vista seguía siendo excelente, pero yo tenía más años, que era imparable y ya estaba aquí: la presbicia. Una auténtica enfermedad lectora. Sólo necesito mis gafitas para leer. Le respondí que me conformaba, porque estaba en paz con la vida. Supongo que dentro de poco, me iré meando por las esquinas como los perros callejeros...

   Pero ahora, pasados los primeros días de coqueteo con la debilidad, me doy cuenta de que cuando llegue a nado a la isla tendré que ir con mis gafas, pues no me servirán de nada, los libros que encuentre flotando y luego seque al sol.

   Y también me doy cuenta de que aunque cumpla años, soy cada día más pequeña.

   Porque eso es, precisamente, necesitar.



   

9 comentarios:

  1. Laura, los gafotas tenemos que presumir de gafas, por eso de hacer de la necesidad virtud. Además, a mí me parece que las gafas os quedan muy bien a las mujeres, igual que los gorros y sombreros. A mí las gafas me hacen parecer serio, sobre todo a quien no me conoce, y eso es bueno hasta que conocen cómo soy realmente. :-D

    Un saludo con gafas.

    ResponderEliminar
  2. Alejandro gafado, nunca serás gafe, y, en cuanto a lo de parecer serio, ¡usas el mismo truco de Clark Kent!

    Pero a mí, no me engañas ;-))

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Blanca Díaz Cachón10 de febrero de 2012, 23:57

      Disculpen la intrusión anglófila:
      Remember this? I remember the first time I read this, I read it with you!!

      "Della finished her cry and attended to her cheeks with the powder rag. She stood by the window and looked out dully at a grey cat walking a grey fence in a grey backyard. To-morrow would be Christmas Day, and she had only $1.87 with which to buy Jim a present. She had been saving every penny she could for months, with this result. Twenty dollars a week doesn't go far. Expenses had been greater than she had calculated. They always are. Only $1.87 to buy a present for Jim. Her Jim. Many a happy hour she had spent planning for something nice for him. Something fine and rare and sterling - something just a little bit near to being worthy of the honour of being owned by Jim".
      Extract from the gift of the Magi by O. Henry
      http://www.eslpod.com/eslpod_blog/wp-content/uploads/2008/11/giftofthemagicover.jpg

      Eliminar
  3. My dear Blanca!

    What a surprise!

    I remember a little girl...twenty years ago!
    I hope you should be happy with the words, our friends.

    Many kisses.

    ResponderEliminar
  4. Querida Laura:
    Mi hobby es la musica,en vez de la lectura yo creo que lo podria probar.
    Espero tu respuesta Bss.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas noches:

      También a mí me gusta mucho la música.¡Tengo muchas aficiones!

      De momento, no uso audífono...por ahora :DD

      Saluditos.

      Eliminar
  5. La presbicia no es un enfermedad. Es un defecto visual asociado a la edad. Me da mucha pena encontrarme multitud de artículos afirmando esto. Por favor, visita mi blog para saber un poco más de esto
    http://www.presbiciaovistacansada.com

    ResponderEliminar
  6. Muchísimas gracias, Gerardo. He simplificado, quizá por poner la atención en la lectura...en vez de en la edad...¿por qué será? ;D
    En todo caso, es mi error y te agradezco tu tiempo en leerme y en corregirme. Muchas gracias.

    ResponderEliminar
  7. Muchísimas gracias, Gerardo. He simplificado, quizá por poner la atención en la lectura...en vez de en la edad...¿por qué será? ;D
    En todo caso, es mi error y te agradezco tu tiempo en leerme y en corregirme. Muchas gracias.

    ResponderEliminar